sábado, 10 de diciembre de 2011

Coherencia con en el terreno

En proceso de enlazar adecuadamente las piezas con el lugar. Se tiene idea de entrar por el noroeste. Se pretende que los enlaces marquen la relación con el perímetro, especialmente junto al muro, ya que en ellos es cuando se tiene cierta consciencia sobre dónde estamos.

La incógnita en cuanto a relaciones tiene que ver con este tema. Cada célula es formalmente independiente. Se construye desde materiales que tienen que ver con dónde estamos, y son estos enlaces los que incorporan la componente material tecnológica al proyecto. De esta forma a esta tabla debería acompañarla de una columna de materiales de vidrio, metálicos y mallados, que son los que componen esta parte del proyecto.

Actualmente trabajando en definir cómo se desarrolla el programa en cada célula, cómo se llega EXACTAMENTE a cada una y en la relación de conexión con su alrededor. En resumen, mayormente trabajo de planta.





martes, 6 de diciembre de 2011

sin plano pero sin pausa

Comunicación entre programa



Conocida las relaciones: tipologías de piezas según requiera uso: con patio, cerradas, altura única, mezcla de programa en piezas...





Disposición en terreno para comprender comunicaciones según cota




ESTRUCTURA: entramado de madera interior complementario a adobe

tipo A: completamente cerrado (archivo)

tipo B: patio de uso característico (sala digital y parte de mediateca)

tipo C: patio de uso no característico (sala de lectura, consulta de libros, enlace a hemeroteca...)

Referencias retomadas

¿Cómo se entra a un Objeto arquitectónico?

 Casa da Música, Oporto
Valle del Jerte, Cristina y Efren

Cómo se camina entre objetos, cómo se comunican y cómo dialogan

Pabellón de Finlandia, EXPO '92 Sevilla 

Museo Kolumba, Colonia, Peter Zumthor

Refugio para Ruinas Romanas, Peter Zumthor

Solución de geometrías similares

Mercado Barceló, Nieto y Sobejano 

 Centro de arte contemporáneo, Nieto y Sobejano 

 Museo Silkeborg, Utzon


martes, 29 de noviembre de 2011

JUGAMOS A LEVANTARNOS





WANTED

SE BUSCA
Un lugar único de recorrido, con piezas individuales incrustadas en él que puedan vivirse no sólo dentro sino también encima, donde se pueda disfrutar de las ventajas de tener cuantiosas horas de sol. El espacio debe ser reconocible como único independientemente del punto en que se esté. Una huevera & sus huevos.



Interesantes espacios y relación de piezas. Harán falta huevos más regulares que otros, y que dentro de ellos se viva correspondientemente diferente, pero es importante también conseguir que el espacio común a todos ellos tenga un mismo lenguaje.

Es orgánico, pero no puede ser tan espontáneo, necesita un ¡orden! A partir de la clasificación de usos y tipos de espacio requeridos por el programa se organiza la malla que garantice que funcionen las uniones de volúmenes.

Por otro lado es importante categorizar el espacio positivo del espacio común, no puede ser sólo intersticial, es básico que la diferencia de espacio de paso y espacio abierto sea clara, aunque sólo se diferencien por sus proporciones. Desde mi punto de vista se necesita por dos motivos, el de circulación y el de orientación. Los espacios de paso deben estar más iluminados para hacer entender al usuario que tienen que ir hacia ellos para llegar a donde quiere, los abiertos serán más oscuros de acuerdo a la cultura en que nos movemos.




Los espacios de vivienda se proponen más altos, creando calle en la cubierta a donde se puede acceder directamente desde la calle en el noroeste del solar. No se quiere una cubierta extensa de todo el edificio, no funciona en este clima. Se puede usar la cubierta principal donde se hace calle como se ha dicho, pero en el resto del edificio sólo deberían ser transitables las cubiertas puntuales de los volúmenes.

Dichas piezas se proponen ligeramente sobresalientes del cerramiento, hablamos de huevera, donde la piel es sincera con lo que lleva dentro.

Cómo dialogan estas arquitecturas, dónde se unen... son los interrogantes principales de estas geometrías.



estudio del programa

Se mira el programa con interés en el tipo de espacios que debemos crear y su proporción respecto al total. Se buscan similitudes entre los lugares cuyo destino es almacenar, donde hay que leer o donde hay que acudir a una conferencia.

La sensación espacial de cada espacio tendrá mucho que ver con el tipo de luz que se disfrute en cada sala. Partiendo de 5 maneras de hacer llegar la luz al interior se clasifican los usos


Pongamos que sean huevos




COLONIZACIÓN

Se pretende encontrar un método de colonización del solar que sea coherente con la ciudad. La delicadeza urbanística de este punto es extrema. En el límite de una ciudad encerrada en sí misma, el  levantamiento de un edificio público (hito arquitectónico dentro de la cultura del parche urbanístico) y la organicidad máxima de la ciudad antigua (una zona tradicional que quiere modernizarse, pero no de cualquier modo ni a cualquier precio).


Precisamente el punto complicado de este proyecto está en saber qué precio se paga por la modernización, por admitir cierta globalización y saberse en el s. XXI; y por dónde no se debe pasar, qué es lo intrínseco a la cultura que vamos a tocar, lo su componente atemporal.


Entre estas reflexiones comienza el proyecto de la BIBLIOTECA EN FEZ. Al estar intramuros se propone una continuidad de la trama urbana. Al menos en apariencia a la calle. Se pretende que la biblioteca aparezca dentro de la manzana sin afectar al espacio visual de la calle, conteniendo esta "caja de casas" la biblioteca por dentro. Se comienza a buscar la biblioteca aplicando una trama de la propia ciudad a distintas escalas y tamaños ¿Queremos un sólido con vacíos intersticiales por dentro? ¿continuidad total? ¿empequeñecer/engrandecer la escala de este cierre de ciudad?





El esquema se entremezcla con el de la biblioteca. Ambos usos están formando un espacio común, entrelazando propiedad pública y privada. Aparecen entidades más importantes en este mundo, espacios importantes que se conectarán linealmente en medio de este mundo. Se busca que convivan dos personas moviéndose independiente por la misma manzana, la que está en su casa y la que busca un libro en la biblioteca, que caminen por encima uno del otro sin saberlo, que se crucen en este mundo. Es un difícil trabajo de circulaciones.

Se propone además un sistema de propiedad para que la biblioteca pueda crecer si lo necesita con el tiempo. Si las viviendas se hiciesen suficientemente flexibles podrían servir a una familia durante ciertos años y pasar ser aulario de la biblioteca, o cuando aparezca un ámbito de la biblioteca que dejase de ser útil para el fin con que se creó se puede vender para que sea propiedad privada y financiar costes del propio edificio.




Se mezclan estos usos en sección, tres tipos de espacios podríamos decir según su uso, la vivienda, la biblioteca y el que es susceptible de formar parte en cualquiera de los otros dos, con suficiente flexibilidad para poder cambiar.


¿DÓNDE ESTAMOS?

Qué mecanismo extraer del comportamiento de la ciudad, cómo entrar en una cultura desconocida o la manera de solucionar problemas climatológicos que no hemos sufrido personalmente. De la observación de estos factores propios del lugar extraemos información que nos ayudará a saber cómo actuar en nuestro edificio.

HUIDA DEL SOL


TEXTURAS DE LA CIUDAD



TROQUELAR UNIR MEZCLAR ENCAJAR

martes, 4 de octubre de 2011

paneles 4 octubre


dibujos y pensamientos rápidos

Colección de dibujos y croquis relacionados con la vivienda para un escritor en Fez




situación y comportamiento a calle

Nuestro solar está en uno de los lugares más característicos de la medina sin perder el tejido propio de ella. Entre la Mezquita principal y el río, con tres plazas de mercado, dos de lana más curtidores, en una de las calles peatonales más reconocibles en plano, donde la pendiente no es lo característico del solar.






Somos conscientes de que dentro de habernos metido en el bullicio de la medina hemos entrado en lo más movido de ésta, eso buscambamos, situación límite de de movimiento en las calles para hacer más clara la separación del proyecto. Se busca situación junto a espacio libre donde poder levantarnos volumétricamente de cara al espacio de comercio, un muro vacío que habitaremos que protege a nuestros pequeños patios de la calle.





Sobre dar pasos en falso

Concepto claro, dos librerías, longitudinal y transversal, comparten el espacio principal y separan los secundarios, son articuladoras de espacios y maclan funcional y formalmente el conjunto.

Dos patios, uno dando servicio a cada idea de la casa, uno cuadrado, mismas proporciones, íntimo, recogido y al servicio de la mente, del disfrute, de Platón.

Otro patio para servir a estancias de hogar, vegetación y agua, ambiental, acondiciona espacio interior, sensitivo por tanto, Aristóteles.

Es un proyecto de continuas dualidades en concepto. Las dos librerías se resuelven también con temas compatibles, una corrida, larga, longitudinal y con transparencia de la luz del patio a través de los libros. En a otra el objeto es opaco, deja pasar la luz al girarla noventa grados y hacer tramos cortos, más que una librería es un conjunto de pequeñas, aunque como muchos conjuntos la suma de objetos crea otro objeto de entidad propia.

El espacio principal es fugado, quiere ser siempre más largo de lo que es, quiere ser la bliblioteca de Boullée!!
En cuanto a alturas una regla: los volúmenes se sitúan a calle, los patios se pegan a medianeras ajenas, queremos se conscientes de esa parte de la ciudad que se nos da en nuestro edificio, no tapar todo lo que no hemos hecho nosotros. Entramos en la cultura del parche.

Sabemos qué queremos hacer, tenemos las reglas del juegos sobre la mesa, ahora es el momento de mirar el proyecto a una cierta distancia y....sorpresa!!! hemos estado trabajando todo este tiempo sobre una planta de casi 600 metros cuadrados proponiendo segundas, terceras alturas y azoteas.

Tenemos las instrucciones del proyecto, por ello no nos da miedo reducir el solar y continuar trabajando sobre las mismas variables

jueves, 22 de septiembre de 2011

Biblioteca Jay Walker





SOBRE ALMACENAR LITERATURA


La larguísima escalera corredera se desliza veloz por los raíles de la enorme, abigarrada librería. La empujo con fuerza. El tomo está en alguna parte, lo he visto infinidad de veces. Lo recuerdo en la estantería superior, es casi seguro, pero no lo veo. Los libros lo cubren todo y hay demasiado desorden.  Acaricio los gruesos lomos esperando que el tacto me ayude a recordar. Tengo que encontrarlo. Sé que está ahí, en algún rincón. 
¿Quieres sopa? repite la voz amable.Y yo me agarro a la silla y dejo que mi tristeza sonría un poco. Cierro los ojos, abro la boca y trago un líquido caliente que me relaja, que disuelve la espesa certeza de un nuevo extravío, la pérdida, esta vez, de la palabra sopa.



LA LIBRERÍA DE VIEJO
Un fin de semana, finalmente, María Elena decidió ir a aquella librería de libros viejos, a la cual le tenía puesta el ojo desde hacía varios meses; ingresó y fue analizando las mesas de la entrada y mirando una que otra vez las paredes a sus costados, cuyos libreros alcanzaban más de dos metros de altura y tenían escaleras corredizas para alcanzar cualquier fila, fue eligiendo uno que otro libro de literatura medieval, además de los que en rigor necesitaba o que le serían útiles para su labor de psicoanalista y no compraría, se había hecho la promesa, aquellos que le atrajeran nada más porque sí.Al fondo del local, penetró en un cuarto, también repleto de libros; allí eligió un par de filosofía de Jaques Diderot, escritor y filósofo que le encantaba; de ahí pasó a otra habitación y de ésta a otra, pero como que iba dando vueltas, y de ésta a otra, cuyas paredes estaban muy próximas y era visible que se encontraban arreglando los libros, ya que había varios montones y cerros en el suelo o montañas que alcanzaban tal vez los dos metros de alto, lo cual le gustaba.El desorden se generalizaba también hacia las hileras de los libreros que se encontraban pegadas a los muros; María Elena tomó una escalera móvil (no corrediza) pues alcanzó a ver en una orilla alta el lomo de un libro que, estaba segura, era de Virginia Woolf, su novela casi autotestimonial: La señora Dallowey. 
Colocó la escalera para poder tomar equilibrio, subió cerca de metro y medio, pero se dio cuenta de que apenas alcanzaba la novela y, sí, era de la Woolf, estiró el brazo, dos de sus dedos consiguieron arrastrar el libro hacia sí hasta que lo tuvo en la mano, y allí fue cuando la pierna derecha resbaló y, con todo y escalera, se derrumbó sobre una torre de libros, cayó en una montaña de ellos y el librero de donde había agarrado el libro se balanceó una y otra vez hasta que, por fin, se fue contra la otra pared, en tanto sus libros iban cayendo encima de María Elena hasta desaparecerla. Mientras, los libros de la pared de enfrente también se desbordaban, lo mismo que las torres que se encontraban a su alrededor, hasta que María Elena quedó enterrada entre miles de libros y en medio de una nube de polvo enceguecedora y asfixiante. María Elena quedó inmovilizada y quizás con no pocos huesos rotos, pensó que el estruendo que había causado el desastre en ese cuarto del laberinto provocaría que los dueños de la librería o los que atendían a la clientela le dieran alcance casi de inmediato; esperó bastante tiempo pero no escuchó a nadie y sentía que el aire le faltaba cada vez más y que los dolores del cuerpo se le expandían de pies a cabeza; cuando, aferrada al libro de su autora favorita (porque además no podía hacer otra cosa: estaba cercada de libros inútiles que no le permitían mover ni un dedo), percibió o intuyó que se apagaban la luces y que ya cerraban la librería. Supo entonces que moriría, más o menos, en no más de dos horas.